martes, 14 de mayo de 2013

Quemaduras


Quemaduras

Las quemaduras son accidentes comunes en el hogar. El sitio de la casa donde se encuentran elementos que puedan causar este tipo de accidentes es indudablemente la cocina, allí debemos orientar nuestra atención para adoptar todas las medidas de prevención.

     A las quemaduras las podemos clasificar en: quemaduras localizadas (son las que invaden una parte pequeña del cuerpo) y las quemaduras generalizadas o gran quemado (son las que ocupan un gran porcentaje del cuerpo y suelen ser de pronóstico muy grave. Más adelante nos referiremos a los primeros auxilios que debemos prestar en este tipo de accidentes).

     Las quemaduras localizadas a su vez se las puede clasificar según la profundidad de la lesión, en quemaduras de:

     Primer grado: Son superficiales, afecta la parte externa de la piel, hay un enrojecimiento de la misma. Las más comunes son las quemaduras solares.

     Segundo grado: Afectan todas las capas de la piel, se siente dolor vivo, quemante, y se caracterizan por aparecer ampollas en la zona lesionada.

     Tercer grado: Son más profundas, atacan no solamente la piel, sino tejidos más profundos; son graves, y las más comunes son las producidas por descargas eléctricas.

     Los elementos más comunes en el hogar que pueden producir quemaduras son: el agua caliente, el aceite caliente, los gases como el vapor de agua caliente, muy común en los bebés que, por curiosidad, van a olfatear el vapor que sale del termo o pava con agua hirviendo, o el vapor que desprenden los elementos cáusticos de uso domiciliario como el cloro, amoníaco, etcétera. Todos estos elementos gaseosos producen quemaduras severas de las vías aéreas.

Medidas de prevención

  • A los mangos de las sartenes y ollas debes ubicarlos hacia el centro de la cocina, no hacia fuera, porque éstos pueden ser manipulados por los niños y volcar el contenido caliente sobre su cuerpo; o ser atropellados por el niño al pasar, generalmente, corriendo.
  • Utiliza asiduamente las hornallas posteriores de la cocina.
  • No dejes al alcance de los niños fósforos o encendedores.
  • Evita abrir la puerta del horno cuando está caliente. Deja salir primero el vapor y recién acerca tu rostro para ver los alimentos; esto podría producirte quemaduras de las vías aéreas y rostro.
  • Coloca protectores de chispas frente a los hogares a leña; éstos deben estar bien fijados al suelo para evitar que los niños caigan en la zona de fuego al jugar o pasar corriendo.
  • Mantén cerrados los armarios y alacenas que contengan sustancias cáusticas.


Continuaremos con este tema en próximas entradas.


Aporte del Dr. Daniel Racca - SEM Morteros (Córdoba) R.A.